Hyde

Puede pasar que tu vida, se vuelve tan simple, algo así como un  pequeño hueco, claro y transparente.

De cuales va en contra de la lógica humana querer salir.

El conflicto esta, cuando a uno le encanta salir… de vidas y entrar en otras.

Un día, la estabilidad, a la gente como yo  nos toma de rehén.

Y no nos devuelve.

Toda mi vida sostuve la postura de que era triste pensar en una sola persona,

De que uno tiene tantos modos por sentir,

Que uno se forma mediante lo que recorre,

Y quien sabe y conoce más que un trotamundos.

Mi  Mrs Hyde interior, aun sostiene esa postura,

El todavía es de esos que si te sirven un café, es para que le abras el corazón.

De los que navegan sin rumbo por tu cicatriz,

Que cuando te abrazan te miman un poco la vida.

Que saben encontrar el gesto exacto para generarte roces  en el alma,

Que te marcan la vida.

Eso todavía continúa vivo en  los impulsos de hoy,

Solo que a diferencia de Hyde,

Ya no salgo corriendo para verte llorar después,

Y desde lejos, ya no busco otro puerto al cual llegar.

Porque ya no quiero cambiar de estación,

Y mis risas ya no esconden engaños, de los cuales pueda otro aferrarse.

Aunque admito, extraño ese caos que te come la cabeza,

Porque vibra,

Y aunque la estabilidad es lo ideal,

Todo por lo que vibramos alguna vez,

Es inolvidable.